Emprender no es jauja

Emprender no es fácil, emprender es esfuerzo, emprender es riesgo, emprender no es jauja. El emprendedurismo se ha incentivado en momentos en los que el paro batia records mientras que las trabas fiscales, administrativas y financiadoras no se reducian.

Los impuestos y las regulaciones asfixian a la pequeña empresa dificultando su creación y su supervivencia. El nuevo empresario debe enfrentarse ante un marco fiscal complejo ya que normalmente, el emprendedor no suele estar familiarizado con la tributación del IRPF, Impuesto de Sociedades o sobre Actividades Económicas. Sería tarea de las administraciones hacer que este camino fuera sencillo y no ofrecer obstaculos.

Un informe realizado por Hiscox, bajo el título de ’El ADN del emprendedor’, y con 4.000 encuestas realizadas entre jóvenes empresarios de Estados Unidos, Alemania, Francia, España, Holanda y Reino Unido deja muy mal parado a nuestro país. Entre los participantes en este estudio no perciben que España facilite la puesta en marcha de proyectos emprendedores. A la hora de iniciar una andadura profesional, los principales inconvenientes que se encuentran los emprendedores son la burocracia y los impuestos. Nueve de cada diez españoles que ponen en funcionamiento un negocio se quejan del papeleo y de los trámites a afrontar, algo que coincide con los franceses. Y eso desespera.

Las cifras de fracaso empresarial durante los cuatro primeros años son muy elevadas: un 80% de mortandad. Pero no por ello hay que desanimarse, a pesar de esta cifra muchos se lanzan y crean su negocio. La clave es: ¿qué hace falta para sobrevivir? No todo vale y por eso no todas las empresas triunfan.

Para que se consolide una empresa en el mercado hay que tener una buena idea y, sobre todo, ser consciente de cómo es la sociedad actual y qué futuro tiene ese negocio soñado. Hay unos sectores que están triunfando en los últimos años que tienen que ver con las nuevas tecnologías, pero también hay nichos de mercado en los sectores de toda la vida.

Para que una idea triunfe es necesaria la constancia aliñada con un razonable plan de financiación. De hecho, es frecuente que la primera idea no será viable, pero que la segunda o la tercera sí que lo será.

Los emprendedores cuentan con ayudas de las administraciones, de las cámaras y de las organizaciones empresariales. Cada Comunidad Autónonoma gestiona sus propios incentivos, por lo que es diferente y hay que informase detalladamente. De ahi la importancia del mentor que presta asesoramiento y acompañamiento continuo.